QUE ESTE AÑO 2020 ha sido totalmente atípico por la pandemia originada por el COVID-19: terminaron e iniciaron los ciclos escolares 2019-2020 y 2020-2021 desde casa, con clases a distancia, marcados por las diferencias existentes entre ciudades, poblaciones, comunidades y rancherías, en cuanto al acceso a la Internet o a la televisión, lugares en donde ni siquiera llega la energía eléctrica, con chavos que se las verán negras para poder estar al día en sus clases y con profesores que se las verán peor, y tendrán que hacer uso de cuanto recurso tengan a la mano para poder llegar a todo su alumnado y que no se rezaguen. 

 

QUE LA PROFESORA de Sabinas Hidalgo en el estado de Nuevo León, Laura Marisol Camacho Saristegui, se hizo viral al “enviar” un mensaje al secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma a través de su perfil de Facebook: “Es muy duro cargar con todo el trabajo el cual hago con mucho gusto. Pero cargar con la situación en la que viven mis alumnos es demasiado. Veo como hacen el esfuerzo en estos días, están animados, pero me parte el corazón al leerlos: -Maestra, me voy a quedar sin datos. Cuando pueda poner una recarga le mando las tareas. -Maestra, fui hacer unos trabajitos y con lo que gané puse una recarga por eso no había podido contestar. -Maestra, trabajo hasta tarde. Disculpe la hora, pero acabamos de terminar. Como maestra, siempre te preocupas por tus alumnos y sabes que por más que te duela no puedes cambiar su situación. Pero podíamos consolar, dar una sonrisa, un abrazo, compartir de nuestro lonche. Llevar las copias, aunque fuera de nuestro dinero, llevar nuestra laptop para poner algún video educativo. Y ahora en la distancia todo se complica y las desigualdades salen a relucir mucho más”. Que a esto se enfrentan día a día millones de alumnos, padres de familia y profesores. ¿Cómo la ve?

 

Que por cierto esta columna recomienda leer el reportaje central de esta edición.

 

QUE EL ALCALDE de San Felipe del Progreso ante la pandemia originada por el COVID-19 se las ha ingeniado para estar cerca de la ciudadanía. Que cada semana, haciendo uso de las tecnologías, da un informe en vivo a través de la red social Facebook. Que ahí da a detalle los pormenores de las actividades que realiza el Ayuntamiento en áreas específicas como son Desarrollo Económico, Salud, Seguridad, etc. Que de igual forma interactúa con la ciudadanía al contestar en tiempo real los cuestionamientos que le plantea la gente. Que otra innovación que hizo al informe semanal es la incorporación de delegados municipales de las diferentes comunidades, para que en vivo y a todo color éstos planteen al Cabildo las necesidades, urgencias y logros llevados a cabo en sus demarcaciones. Que sin duda esta forma de comunicar que lleva a cabo Alejandro Tenorio le ha redituado un buen acercamiento con sus gobernados.

 

QUE HACE UNOS días el partido político MORENA abrió en Atlacomulco su oficina regional para dar atención a los habitantes del distrito 01, con cabecera en Jilotepec, además de Temacalcingo, Aculco, Acambay, Timilpan, Morelos, Chapa de Mota, Villa del Carbón, Soyaniquilpan y Polotitlán. Que también brindará atención a los habitantes del distrito 03, con cabecera en Atlacomulco, al que le corresponden, además, El Oro, Ixtlahuaca, Jocotitlán y Jiquipilco. Que a esto se sumará la atención al distrito 09, éste abarca los municipios de San Felipe del Progreso, como cabecera, San José del Rincón, Villa Victoria y Villa de Allende. Que en la apertura de la oficina estuvo presente el alcalde de Atlacomulco, Roberto Téllez, quien aseguró que para las elecciones del 2021 van por los municipios que aún no son gobernados por el partido oficial, así como por el distrito 01 con cabecera en Jilotepec y que actualmente ocupa Ricardo Aguilar Castillo. Que los que saben de asuntos políticos, y que además le hacen al pitoniso, aseguran que Téllez Monroy va por la reelección y para ello ya tiene el control de las oficinas municipales del PT y ahora de la regional de Morena. Que será muy interesante ver cómo le juegan la candidatura Nicolás Martínez Romero, Laura Félix y la familia González Escobar. ¿Cómo la ve?

 

QUE POR CIERTO también será muy interesante ver cómo se le mueven los números políticos al alcalde atlacomulquense con la decisión de autorizar la instalación de la feria en la Plaza Roja. Que viene a cuento la duda por cómo se movieron las redes sociales cuando se supo de esta decisión. Que la mayoría de los comentarios estuvieron en contra, argumentando que era un despropósito toda vez que el semáforo epidemiológico se encuentra en naranja y, por ende, prohíbe se instalen este tipo de ferias que por su origen concentran a mucha gente. Que, por supuesto, también hubo quienes se expresaron a favor esgrimiendo que uno de los sectores comerciales más afectados por la pandemia fue precisamente el de los ferieros, que llevaban todo el año sin poder ofrecer sus servicios con el consiguiente deterioro en su economía. Que un sector se vio beneficiado en lo económico y otro, el más numeroso, sintió que se vulneraron sus derechos al poner en riesgo su salud. Que ya se verá en el corto plazo los números que arrojó la instalación de la feria. 

 

QUE LA COMISIÓN Federal de Electricidad (CFE), dio a conocer un boletín informativo en donde dio a conocer que ellos “NO PODAN” árboles, lo que ellos hacen es limpiar las ramas que obstruyen el suministro de energía eléctrica. Que esta columna supone que esta aclaración la hizo al CFE para aclarar exactamente qué es lo que hace y acallar los comentarios mal intencionados en donde se asegura que esta empresa anda dañando el medio ambiente. Que cómo sea, de una vez se curan en salud por lo que les pueda venir a futuro.

 

QUE OTRA OFICINA que anduvo dando mantenimiento a los postes de las lámparas en las calles fue precisamente la Coordinación Municipal de Alumbrado Público. Que el trabajo abarcó la reparación de luminarias en mal estado, retiro de publicidad y pinta de los postes. Que también se le dio su manita al alumbrado del libramiento. Que hablando de la publicidad que se pega y cuelga de postes de la CFE, de Telmex, semáforos y alumbrado público, el Bando Municipal en su Capítulo III, Artículo 208 fracción IX, prohíbe terminantemente este tipo de prácticas, que daña la infraestructura municipal y estropea la imagen urbana. ¿Cómo la ve?

 

El aplauso de la catorcena: A las autoridades religiosas católicas. Limitar la fiesta patronal y las aglomeraciones que convoca es muestra de que, por esta ocasión, ganó la prudencia. Ya habrá tiempo para festejar en los años por venir.

 

El abucheo de la catorcena: Al Ayuntamiento de Atlacomulco por autorizar la colocación de la feria. Definitivamente fueron más los contras que los pros. Además, le dieron armas y parque a sus malquerientes. Se pusieron de a pechito, pues. 

 

El beneficio de la duda: Como “anillo al dedo” les quedó a los y las aspirinas la decisión de colocar la feria de Atlacomulco en plena pandemia, les sirvió para llevar agua a su molino aspiracional. ¿Para qué tanto les alcanzará? Ya se verá en el futuro cercano. 

 

Les cayó de perlas

 

Algo que queda bastante claro, es que autorizar la colocación de la feria en Atlacomulco durante la pandemia, es una idea poco afortunada; porque, en la percepción de cualquier ciudadano, no ayuda en nada a retomar la normalidad de nuestras vidas, sino todo lo contrario.

 

Pero, ya que hablamos de ayudas, hay un segmento de personas que festejaron la ocurrencia con enorme gozo y sienten que este es el impulso que necesitaban.

 

Sí, hablamos de los aspirantes que, desde hace meses, están desatados en su carrera por ser elegidos como candidatos y eventuales presidentes de Atlacomulco.

 

Lo ocurrido estos días es una verdadera mina de oro de la que pueden sacar –ya lo están haciendo- numerosos beneficios. ¿Que suben los casos de COVID-19?  A explotarlo presentando a esta administración como irresponsable. ¿Que pavimentaron la Plaza Roja?, A poner el dedo en que los mantos acuíferos van a resentir el aporte de las lluvias.  ¿Qué las cosas eran mejores en el pasado? A glorificar lo hecho antes, como si hubiéramos vivido en el primer mundo.

 

El real ejercicio de la política usa –en realidad, necesita- los errores ajenos para sublimar un futuro mejor. No puede ser de otro modo, de manera que hoy, todos los adversarios de esta administración municipal bailan de gozo, porque se sienten más cercanos a un buen resultado el 6 de junio del próximo año.

 

Esto no les alcanzará para estirarlo los 6 meses y medio que restan para que los partidos políticos escojan a sus candidatos; pero, sabiéndolo administrar, sí que les puede dejar dividendos muy atractivos. 

 

Hoy, y en el tiempo por venir, ruegan por más decisiones de este tipo, mas tropiezos, más controversias, más necedades.

 

¿En el Ayuntamiento les seguirán ayudando con esa parte?

 

El Señor Darwin en la Feria de Atlacomulco

 

 

Me vino a la cabeza una palabra muy interesante. Es “oclocracia” y quiere decir, más o menos, el gobierno de la turba, o el gobierno de la chusma … el gobierno de los irracionales, para acabar pronto.

 

Es la dictadura de los que actúan con el hígado y el cerebro lo tienen de adorno.

 

Señoras y señores, que siempre sí habrá feria en el sufrido Atlacomulco. Cosa de reactivar la economía -¿la de quién?- para que haya desarrollo y para que muchas familias no se queden sin comer…y sin divertirse.

 

Podría, por ejemplo, en este mismo momento comenzar una perorata sobre los riesgos que eso tiene para la población en general –porque no, no es nada más para quienes van a ir a tan señalado evento-, o evidenciar el contrasentido de tanto anuncio a nivel mundial y las particularidades que este municipio tiene.

 

Caray, qué afortunados somos todos. Ni París, ni Nueva York, ni Moscú, ni Buenos Aires son inmunes a COVID-19. Pero en el muy humilde Atlacomulco, la gente está hecha de latón y el coronavirus le pela los dientes.

 

Vientos.

 

Podría, como ya he dicho, señalar otras cuestiones, como por ejemplo el evidente valemadrismo de las autoridades locales y la poca valoración que tienen por la vida de la ciudadanía en general, generadora de sus sueldos.

 

Pero no. Este texto no es para quejumbres ni para dramas, sino todo lo contrario.

 

Veamos que esto tiene y tendrá ventajas muy interesantes, las cuales están a la vista y – me extraña- nadie ha resaltado.

 

Por ejemplo, a la entrada de la feria podríamos colocar un aparato que haga el cómputo de personas que habrán de ingresar. ¿Para qué? Bueno, el aparato que mide la velocidad es un velocímetro. El que mide la lluvia, pluviómetro. El que mide el sonido, sonómetro. El que mide la temperatura, termómetro. 

 

Este sería un neciómetro…o quizá un estupidómetro.

 

Ahora pensemos en las consecuencias durante los días por venir. 

 

A nadie se le puede obligar a no ir. Por el contrario, debemos respetar la libertad de la gente, entendiendo que esa misma gente debe estar consciente de los resultados por ejercer su libertad.

 

Así que, aquí va un punto más, este de carácter científico.

Estudiosos a nivel mundial aseguran que la humanidad se está volviendo más tonta conforme pasan las generaciones. Según su cómputo, el coeficiente intelectual va en franco descenso en Europa, donde los muy civilizados habitantes de Noruega, Francia, Dinamarca o Inglaterra van escaleras abajo en eso de razonar.

 

Bueno, pues en la lucha por ese trono en Atlacomulco tenemos la valiosa oportunidad de mostrar que en las Américas también se tuestan habas, y que además esto se hace con mucho disfrute y sin remordimiento.

 

¿A poco nos vamos a dejar?

 

Y ahora la última nota positiva de este escrito.

 

Si a sabiendas de los riesgos, los contagios y las muertes que pueden ocasionarse por cosas del COVID-19, la gente va con gusto y se divierte, ¿quién es uno para juzgar?

 

Mejor pensemos en que, quizá, quienes nos cuidamos, podamos salir sin daño y sin esfuerzo de este paso. Pensemos en que las muertes que pueda dejar este fenómeno, siempre repercutirán en mayores recursos para quienes queden vivos.

 

Aire más puro, más comida, menos tráfico, menos disputas vecinales, más espacio en la vida cotidiana…

 

Ah, qué idílico panorama...pura selección natural.

 

A propósito: Viéndolo bien, sí, que haya feria. 

CENTRALISMO DE NUEVO

 

 

La idea: Desde que los aztecas dominaron Mesoamérica, el territorio que hoy es nuestro país ha sido gobernado desde la Ciudad de México. Ha habido rebeliones contra el dominio del centro y secesiones:  fallidas unas y exitosa otra, de estados de la república. Hoy nuevamente, algunos gobernadores se manifiestan contra las políticas dictadas desde el centro, pero no tienen la fuerza para contrarrestarlas.  

 

La centralización del poder gubernamental en nuestro país, lleva ya siete siglos. Los aztecas fundaron su ciudad en 1321, en un islote en medio del lago de Texcoco, a la que llamaron “Ombligo de la Luna” o México y a partir de allí la convirtieron en el centro de su imperio. 

 

Tras la conquista, los españoles asentaron allí su capital, gobernando a la Nueva España desde el Palacio Virreinal, erigido sobre los restos del palacio de Moctezuma Xocoyotzin y donde hoy se encuentra el lujoso Palacio Nacional. En siete siglos, no solo se ha gobernado el territorio nacional desde la misma ciudad sino prácticamente desde el mismo predio, el cual abarca 40 mil m² y es ahora residencia del presidente de la Republica.   

 

Ya independiente, en la primera mitad del siglo XIX, México osciló entre la república federal y la república centralista. En esos vaivenes, se separó el estado de Texas mientras que Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Zacatecas y la península de Yucatán lo intentaron sin éxito.  Después de la intervención francesa, Juárez y Díaz consolidaron una república federal en el papel, pero en los hechos con un gobierno central poderoso dirigido desde Palacio Nacional. Juárez incluso vivió allí.

 

A pesar de que la Revolución se originó en los estados, primero contra el gobierno de Díaz y luego contra el de Huerta, acabó consolidándose dos décadas después en un centralismo absoluto bajo el dominio del PRI, ejercido desde la Ciudad de México, periodo al que el historiador Krauze llamó la “Presidencial Imperial”. 

 

Esto cambió con la llegada de la alternancia en el poder. Los presidentes Fox y Calderón ya no tuvieron una “Presidencia Imperial”, sino una presidencia acotada, con un congreso adverso y con mayoría de gobernadores del PRI. 

 

Por ello, el centro de gravedad se trasladó en algunos aspectos a los estados y eso permitió que en 2012 el PRI volviera a ganar las elecciones presidenciales en un movimiento apoyado por los gobernadores de ese partido, encabezados por el del Estado de México, Peña Nieto, quien, sin embargo, ya no pudo consolidar una presidencia imperial. 

 

Hoy tenemos al presidente López Obrador, con un mandato poderoso que está fortaleciendo al centro como no se veía en muchos años, apoyado por una mayoría en el Congreso y en los estados. Ese mandato se logró mediante tres campañas presidenciales, años de recorrer todos los rincones del país y estar en contacto con gran parte de la población, lo cual le dio una enorme base de apoyo popular.   

 

Recientemente un grupo de gobernadores provenientes de partidos de oposición han pedido un nuevo pacto fiscal para que los estados tengan acceso a más recursos y evitar que estos se vayan a proyectos que no benefician a la población de sus estados, como las enormes inversiones que se están haciendo en el sureste de México.

 

Pero hay que recordar que la Cámara de Diputados, los representantes de los estados, son quienes asignan dichos recursos. Hoy en día, el partido del presidente es quien decide, porque así lo decidió la población con su voto y los recursos se irán a los proyectos del presidente y no a donde prefieran los gobernadores.   

 

Los gobernadores se enfrentan a una pérdida de poder dictada por sus propios ciudadanos. Si quisieran inclinar la balanza hacia una mayor descentralización en la toma de decisiones, tendrían que disputar esa base de apoyo que tiene el presidente y ello solo se logra con gran cercanía a las personas, sensibilidad a los problemas locales y capacidad para dar buenos resultados. 

 

Negociar con el presidente una mayor descentralización, es solo reconocer quien tiene el poder de decisión sobre los asuntos que les interesan a los gobernadores. En lugar de seguir ese camino, donde no hay incentivos para ceder poder, deberían buscar ese apoyo entre sus gobernados, para elegir diputados que apoyen su visión descentralizadora.

 

Por otra parte, hay dos aspectos peligrosos que buscan impulsar la descentralización y que habrá que evitar a toda costa: 1. La delincuencia organizada requiere que no haya intervención del centro para aprovecharse de las débiles estructuras locales y dominar las regiones donde opera y 2. El que gobiernos locales se conviertan en cleptocracias, con el fin de enriquecer a sus funcionarios, como ya ocurrió con un buen número de gobiernos estatales.  

 

El poder se está concentrando nuevamente con fuerza en Palacio Nacional. Si se quiere un nuevo pacto federal, los estados y sus gobernadores tendrán que fortalecer sus propias instituciones y realizar una mejor labor para ganarse el apoyo de la población que hoy apoya, más bien, a un presidente popular.  

 

MURALES: LO CARO Y LO HIPÓCRITA

 

No es un lugar común, sino una afirmación categórica: la pandemia por COVID-19 ha sacado lo mejor y lo peor de las personas y las sociedades. En cierto modo, nos ha mostrado de qué estamos hechos todos.

 

Parte de las manifestaciones humanas que resaltan durante estos días son las expresiones artísticas que, en virtud de los tiempos, plasman cómo se vive y qué se enaltece durante la etapa del coronavirus. 

 

Sin duda, en Atlacomulco, el trabajo pictórico más relevante es el mural que se encuentra bajo el puente vehicular en la salida hacia San Felipe del Progreso, donde la temática es tan simple como poderosa: un niño de rasgos netamente mexicanos le ofrece una flor a un trabajador del sector Salud, quien se observa cansado o agobiado. 

 

El mensaje es claro; un tributo al esfuerzo de todos los trabajadores al cuidado de nuestras vidas.

 

 

PUEBLO DEL BICENTENARIO

 

A la memoria de mi padre el señor Juan Allende Guerrero, quien tanto amó a su pueblo, a sus tradiciones y a su gente.

 

Pueblo mío, alegre y progresista.

Te yergues orgulloso, con majestad de siglos.

Y en tus barrios y avenidas se palpa

la imagen pintoresca de un exitoso devenir.

 

 

Conservas receloso hermosas tradiciones,

que son para tus hijos, orgullo regional.

Son éstas la esencia de tu alma provinciana,

que habrá de acompañarte hasta la eternidad.

 

 

En el campo se encuentran tus raíces,

en el comercio tu historia más reciente,

y en el trabajo y empeño de tu gente,

el auge de un promisorio porvenir.

 

 

Destacados hombres y mujeres de ciencia y de cultura,

han surgido de tus entrañas fértiles,

para gloria de tu nombre,

para honra y orgullo de tu gente.

 

 

Naciste con enorme corazón hospitalario,

que a propios y extraños les causa admiración.

Que éste profundo sentimiento de nobleza

haga latir eternamente tu campirano corazón.

 

 

¡Pueblo mío, alegre y progresista!

EL CONGRESO QUE VIENE, ¿CONTRAPESO O CONTLAPACHE?

 

“Si envías refuerzos a todas partes, serás débil en todas partes”.

Sun-Tzu, “El arte de la guerra”.

 

Preámbulo.

Al momento de escribir este artículo, sabemos que en las elecciones federales del próximo año competirán 8 partidos políticos: PAN, PRI, PRD, PT, PVEM, MC, MORENA y PES.  México Libre, de Margarita Zavala y Felipe Calderón ha quedado fuera de la competencia y, salvo que el Tribunal Electoral resuelva a su favor las impugnaciones que presenten, no podrá participar en los comicios de 2021.  Podemos estar seguros que ML sólo  utilizará la vía jurídica para intentar revertir la decisión del Consejo del INE y no harán, como sugirió socarrona e inoportunamente el Presidente de la República, marchas ni plantones para presionar a los jueces que decidirán el destino de esta organización política.

 

La aplanadora. 

MORENA, el partido del Presidente López, tiene el enorme reto de conservar la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados, sin que su líder natural aparezca en boleta alguna, aunque desde su cargo siga ejerciendo –indebidamente- el papel de candidato eterno.  Difícil tarea, ya que sus candidatos a diputados –incluyendo a sus aliados- obtuvieron alrededor de 19 millones de votos, cifra muy lejana a los más de 30 millones que obtuvo el hoy jefe del poder Ejecutivo, pero que les bastó para conseguir mayoría en 218 de los 300 distritos electorales: 161 para MORENA y 57 para el PT y PES.  

 

Gracias a las curules de representación proporcional, MORENA cuenta hoy con 251 de los 500 diputados totales (forzada mayoría absoluta), pero sumándole los de sus incondicionales PT y PES, más los del mercenario PVEM, la fracción del presidente llega a los 334, una frágil mayoría calificada que le ha permitido hacer modificaciones constitucionales a su antojo.

 

Vistos fríamente, los números pueden impresionar a los opositores.  Trasladados a porcentajes reales, veremos que esos tres partidos consiguieron el 43% de los votos válidos emitidos.  Es decir que el 57% de los votantes elegimos una opción diferente y, sumando a los abstencionistas, debemos considerar que más del 72% de los ciudadanos mayores de edad no votamos por esa coalición.  Es más, 66 de cada 100 ciudadanos no le dimos el voto a López Obrador.   Ya no suena tan impresionante, ¿verdad?

 

La meta.

Si en realidad queremos que la Cámara baja se convierta en un contrapeso real del poder presidencial, como lo fue entre 1997 y 2018, es necesario que MORENA y sus compinches obtengan un máximo de 145 diputados de mayoría y menos del 40% de la votación total.  Esta combinación le daría unas 241 curules, frente a las 334 que detentan ahora.  Matemática simple que permitiría a los partidos de oposición coaligarse para obligar al Presidente a que gobierne por igual para todos los mexicanos.

 

El método.

Preguntémonos cómo hacer para detener esa aplanadora que lució imparable en las elecciones pasadas.  No será fácil, pero técnicamente es posible.  

 

Cada partido tiene perfectamente evaluadas sus posibilidades en cada uno de los 300 distritos electorales.  Así que lo primero que habría que hacer es asignar un peso ponderado a cada uno de los cuatro opositores: PAN, PRI, PRD y MC.   En este momento, el PAN tendría un peso de 47%, el PRI de 30%, el PRD de 7% y MC de 16%, por lo que tendrían preferencia para seleccionar candidatos en 141, 90, 21 y 48 distritos, respectivamente; desde luego en los mejores de cada cual.  Los tres partidos restantes se abstendrían de presentar candidatos o, de preferirlo así, presentarse en coalición con el “líder” de cada distrito.  De esta forma tendríamos 300 contiendas entre sólo dos opciones, con amplias posibilidades de obtener triunfos en al menos 160 de ellas.

 

Yo he aventurado esos pesos ponderados de los partidos con base en su participación actual en el Palacio de San Lázaro, pero entiendo que existen otros factores que podrían modificar esas cifras.  Lo que es importante es que desde este momento, los cuatro opositores tomen definiciones claras.

 

El obstáculo.

Este método elemental no presenta, aparentemente, falla alguna.  Si este acuerdo se estuviese planeando entre cuatro empresas privadas, tendría viabilidad.  Pero la ley electoral de nuestro país plantea un sistema perverso para el financiamiento público a los partidos, que consiste en asignar los montos de acuerdo a los resultados de cada uno de ellos en la elección federal más reciente.  Por tanto, en 2021 el objetivo principal de los partidos no será ganar curules, sino obtener recursos económicos; cada voto vale dinero, para decirlo en lenguaje simple y prosaico.  Trasladado a números, cada elector trae en su mano al menos 400 pesos y con el crayón decide a quién se le asignará esa cantidad en los próximos 3 años.

 

Así que los involucrados tendrían que hacer a un lado su egoísmo y sus intereses económicos para conseguir lo que tanto pregonan: el bien de México y el acotamiento del poder presidencial.  La verdadera prueba del ácido.

 

En este sentido, siendo realista, me permito dudarlo.  Espero equivocarme.

 

Guadalajara, Jalisco, septiembre 10, 2020.

 

Apuntes sobre las elecciones de 2021

 

 

Es común escuchar a los analistas políticos, gerentes de campañas electorales y a los politólogos decir que en una campaña electoral se venden tres elementos de manera conjunta: a) el partido político; b) el candidato, y; c) la propuesta. 

 

En algunas ocasiones, el partido político es el que garantiza la victoria de un candidato. En otras, es el candidato el que garantiza la victoria a pesar de ser postulado por un partido poco popular. Y en muy pocas ocasiones, es una buena propuesta la que conquista la confianza de los electores. 

 

Es importante considerar que estos tres elementos implican también la posibilidad de combinarse de diferentes maneras, generando distintos escenarios: ya sea un buen candidato en un buen partido con una buena propuesta, o un mal candidato en un buen partido, con una mala propuesta, etcétera. En fin, las posibilidades de mezcla de estos tres elementos son muchas.

 

Si bien estos tres elementos juegan un papel fundamental en las posibilidades de éxito de una campaña electoral, también son importantes el contexto, la oposición, los resultados del gobierno en turno, las reglas electorales, el financiamiento, entre otros.

 

En lo que concierne a la elección de 2018, casi todos coincidimos que el carisma y liderazgo del entonces candidato Andrés Manuel López Obrador fue determinante para la victoria de la coalición MORENA-PES-PT. 

 

No obstante, algunos de los representantes populares que llegaron al poder mediante esa coalición han olvidado que fue el llamado efecto Obrador el que les otorgó la victoria. Es decir, creen que su éxito es debido a su popularidad, cuando en muchas ocasiones no fue así.

 

Sobran ejemplos de alcaldes, diputados (locales y federales), y hasta senadores que llegaron al poder sin contar con la popularidad necesaria para ganar una elección por sí mismos. Su único punto a favor fue la popularidad del entonces candidato presidencial de MORENA-PT-PES. 

 

Incluso existen casos extremos como el de Cuernavaca, Morelos, en que la coalición MORENA-PES-PT ganó la alcaldía sin tener candidato. O está también el caso del Distrito Local XIII con cabecera en Atlacomulco, en el que ganó una candidata a diputada sin arraigo en la región, que no hizo campaña y cuyo nombre no apareció en la boleta electoral. En síntesis, sus victorias se explican solamente por la fuerza electoral de López Obrador.

 

Pero cada elección tiene sus particularidades y si la coalición gobernante cree que llegó para quedarse o que tiene segura la victoria en 2021, está cometiendo un error estratégico. 

 

Por ello, menciono tres circunstancias que podrían disminuir la representación que actualmente tiene la coalición gobernante: 1. El Presidente no estará en la boleta electoral; 2. Ningún partido político tiene votos suficientes para ganar por sí solo; 3. La carencia de liderazgos fuertes. Los explico a continuación:

 

1. El Presidente no estará en la boleta electoral.

 

De acuerdo con el modelo Poll of polls disponible en oraculus.mx, el 58% de la población mexicana aprueba la gestión del Presidente de México. Esta aprobación sin duda generaría beneficios para la coalición gobernante en las próximas elecciones, pero a diferencia de 2018, el nombre Andrés Manuel López Obrador no estará en la boleta electoral, es decir, que el llamado efecto Obrador podría ser menor en 2021 que en 2018. La única forma en que AMLO influiría en la boleta es indirectamente, si es que se aprueba la consulta popular para someter a juicio a los ex Presidentes de México.

 

2. Ningún partido político tiene votos suficientes para ganar por sí solo.

 

Las últimas encuestas de preferencias electorales levantadas a nivel nacional demuestran que después de 2018 la configuración del sistema de partidos cambió. Por ejemplo, la última encuesta de Alejandro Moreno realizada para El Financiero, en marzo de 2020, demuestra que el 59% de la población no apoya a ningún partido. Mientras tanto, el partido político con mayor apoyo popular es MORENA, pero solo con el 18% de las preferencias electorales; el PAN con el 10% y el PRI con el 8%. Estamos en pocas palabras, ante una crisis de representación de los partidos políticos de México.

 

3. La carencia de liderazgos fuertes.

 

Una vez que se comprende que los partidos políticos, incluso los más grandes carecen por sí solos de votos suficientes para ganar una elección, queda recurrir a la popularidad de sus líderes. Sin embargo, en este aspecto todos los partidos tienen otra fuerte crisis. 

 

Por su parte, la oposición carece de líderes a tal nivel que, el opositor por excelencia al gobierno actual es Felipe Calderón. Así de grotesca es su situación.

 

Por la otra parte, MORENA tiene un líder natural, que es el Presidente. Pero sin él, existen conflictos entre los diversos grupos internos que son difíciles de mediar. Su única esperanza está toda puesta en Mario Delgado. Veremos qué tal resulta.

 

Lo mismo sucede a nivel local: los partidos perdieron a gran cantidad de sus votantes duros y en su lugar se encuentran con una ciudadanía más contestataria y menos leal a las siglas de un partido. 

 

Además, a nivel local, los partidos se encuentran con una gran escasez de liderazgos. Son pocos los partidos que tienen a nivel local a un líder fuerte que asegure la victoria por sí mismo. 

 

Bueno, en el caso del Estado de México, la situación está tan complicada para la oposición que el PRI y el PAN consideran contender juntos. Sin darse cuenta le darán la razón al Presidente en su narrativa del pueblo contra los neoliberales. Allá ellos.

 

El único partido que podría dar una sorpresa si contiende solo, sería el PVEM. Aunque lamentablemente, para construirse ha tenido que echar mano de la pepena de los peores ex alcaldes que tuvo el PRI. Pero no se le puede pedir mucho, es el Verde.

 

En breve, ningún partido tiene asegurada la victoria, por lo que cada uno tiene que construir su base de apoyo y seleccionar adecuadamente a sus candidatos. Eso es lo difícil.

 

Por ejemplo, el reto del PRI será seleccionar candidatos frescos y limpios, sin cola que les pisen. Pero la evidencia comprueba que eso es imposible para el PRI. Seguramente recurrirán a los impresentables de siempre, a sus viejos caciques.

 

Por su parte, ante la ausencia de candidatos suficientemente populares para ganar solos, MORENA se enfrenta ante el reto de saber repartir el pastel, dirimir diferencias entre sus facciones internas y llegar a acuerdos que le permitan salir a la elección con unidad. Nada sencillo si se considera la postura radical de algunas de sus corrientes.

 

Por ello, considerando que a ningún candidato o partido le alcanza para ganar solo, el candidato o partido que gane será el que sepa hacer mejor política: el que sepa construir más y mejores alianzas estratégicas. Será la lucha de los candidatos contra sus egos.

 

Finalmente, considerando la baja aceptación que tienen todos los partidos y la carencia de liderazgos existente, es muy probable que los partidos y candidatos que resulten ganadores tengan menos de la mitad de la votación a su favor. En consecuencia, el reto que tendrán al llegar al poder será el de la gobernabilidad. Esa es la tarea pendiente.

 

LA  MENTIRA DE LOS PRODUCTOS MILAGRO PARA PÉRDIDA DE PESO

 

Durante años todo ser humano ha buscado la manera más sencilla de perder peso y verse más estético, a raíz de esto han surgido miles de productos que prometen ayudarte a lograrlo, muchos de ellos incluso te dicen “logra bajar de peso sin ejercicio y sin dieta” Wow estamos ante el mayor hallazgo de la humanidad ¿Cómo puede ser posible esto? Me estás diciendo que puedo perder esos kilos de más sin necesidad de salir de mi zona de confort ¡Eureka!

 

¿Qué hay detrás de esta falsa esperanza? Los productos milagro son aquellos suplementos, pastillas o bebidas (Herbalife) que aseguran que perderás peso sin el mínimo esfuerzo, sin embargo esto es una total farsa, siempre muestran fotografías de personas que probaron el producto y consiguieron verse mejor, pero no sabemos que hay realmente detrás de esos testimonios, no hay hasta el momento evidencia científica que sustente lo que ellos afirman, además de que pones en riesgo tu salud, hay que recordar que ninguno de estos productos están avalados por la COFEPRIS y no tienen registro ante la Secretaría de Salud. En este enlace puedes encontrar un listado de productos catalogados cómo milagro y que no están avalados https://julioastillero.com/cofepris-publica-lista-de-productos-milagro-que-no-cuentan-con-registro-sanitario-y-advierte-sobre-los-riesgos-de-su-uso/ 

 

Estos productos lo que hacen es que pierdas agua o músculo que no es lo correcto ni lo más saludable, el peso es subjetivo, puedo pesar 100 Kg, pero si mi porcentaje de grasa es idóneo estoy saludable.

 

Estos productos mencionan “pierde grasa rápido tomando este producto sin necesidad de dieta y ejercicio” pero después mencionan, “si acompañas este producto con dieta y ejercicio tendrás resultados más rápidos” ¿Por qué? Porque la dieta y el ejercicio son los métodos que te hacen perder grasa y por lo tanto peso corporal.

 

¿Cuál es el proceso correcto para perder grasa?

 

1.- Para perder grasa es necesario y primordial que primero haya un déficit calórico, es decir que las calorías que yo consumo sean menores a las que gasto a lo largo del día. Si una persona consume utiliza 2,000 calorías al día, pero consume 2,500 hay un exceso de 500 calorías que terminarán convirtiéndose en grasa, el déficit no debe ser mayor a 500 o 1000 calorías para ello es necesario acudir con un especialista, en este caso un nutriólogo quien, con base en las mediciones que tenga, tu historial, tu actividad física y otras características personales diseñará un plan alimenticio adecuado a tus necesidades y requerimientos.

 

2.- La grasa pasa por un proceso de oxidación (científicamente llamado beta-oxidación) el cual consiste en lo siguiente: 

 

a) Lipólisis: Se produce a través de un mayor gasto de calorías de las que se consume (Dieta, Ejercicio o Dieta + Ejercicio)

 

b) Triglicéridos: En la lipólisis los triglicéridos se convierten en ácidos grasos y glicerol.

 

c) Ácidos grasos: Estos se transportan a través de la sangre y llegan al musculo.

 

d) Beta-oxidación: Dentro del músculo los ácidos grasos se trasladan a la mitocondria donde se oxidan para producir energía.

 

Este es el proceso por el cual se pierde grasa de manera natural, es el fundamento fisiológico para lograr determinado objetivo ¿Cómo podría un producto hacerte perder peso/grasa sin necesidad de una dieta y ejercicio? Una pregunta interesante.

 

Aquí en esta imagen cortesía de Walter Serrano y Erick Mosqueda, ambos nutricionistas de México y Ecuador respectivamente, muestran estrategias nutricionales para pérdida de grasa:

 

Todo esto, repito, es necesario que lo prescriba un nutriólogo, nadie más debe  “recetarte” una dieta y mucho menos ofrecerte pastillas, licuados, jugos, etc., que aseguren te bajarán de peso.