QUE EL PASADO 22 de octubre entró en operación el cuerpo policiaco de Tránsito Municipal de Atlacomulco, el cual está conformado por 7 elementos femeninos y 4 masculinos. Que las únicas que tendrán la facultad de levantar infracciones son las mujeres, los hombres sólo harán las funciones de acompañamiento y respaldo a la labor de las oficiales. Que el Reglamento sobre el que operarán será el Estatal ((http://legislacion.edomex.gob.mx/.../rgl/vig/rglvig079.pdf).  Que las multas irán de los 5 a los 25 salarios mínimos ($616.00 a $3,080.00), dependiendo la infracción al Reglamento. 

 

QUE LAS VIALIDADES que están bajo la jurisdicción municipal son todas las de la cabecera municipal, excepto las avenidas Isidro Fabela y Mario Colín, así como el libramiento Jorge Jiménez Cantú, estas tres seguirán bajo la jurisdicción de Tránsito Estatal. Que algunas de las violaciones al Reglamento de Tránsito que serán motivo de infracción, son las siguientes: a) circular o estacionarse en sentido contrario; b) estacionarse en lugar prohibido donde haya señalamiento; c) obstruir rampas para discapacitados; d) obstruir pasos peatonales; e) estacionarse en áreas exclusivas para discapacitados sin portar el marbete correspondiente; f) estacionarse en doble fila. ¿Cómo la ve?

 

QUE POR CIERTO cuando se hizo el anuncio de la entrada en funciones de Tránsito Municipal en la página de Facebook de d’interés, de inmediato muchas de las reacciones y comentarios fueron dirigidas hacia los taxistas, porque ya se sabe que estos señores se rigen bajo su propio reglamento, que es el de violar sistemáticamente todo lo que tenga que ver con el buen conducir y el respeto a leyes y reglamentos: no pagan derecho por uso de suelo y parquímetro, se pasan los semáforos en rojo, hacen acenso y descenso de pasajeros donde se les da la gana, usan cualquier calle como lanzadera y base, y etc., etc., etc… 

 

QUE OTRO SECTOR que también fue muuuy criticado es el comercial por el apartado de la vía pública y el uso comercial que se les da a las banquetas, toda vez que éstas ya son una extensión de sus locales. Que lo más patético de esta situación es que hay ¡CINCO! instancias gubernamentales que se supone deben vigilar y sancionar todos estos abusos y nomás no hacen nada, a saber: Delegación de Movilidad, Coordinación de Movilidad, Dirección de Desarrollo Económico, Dirección de Gobernación y Parquímetros, de las 5 oficinas ¡NO SE HACE UNA!

 

QUE COMO YA es sabido, el Congreso de la Unión canceló 109 fideicomisos por supuestos malos manejos, se recalca el “supuesto” porque al menos al cierre de edición (2.11.20) no se habían hechos públicos los “malos manejos” que dieron la pauta para su eliminación. Que dentro de estos fideicomisos que se eliminaron va el fondo Mixto CONACYT-Gobierno del Estado de México (FOMIX), que sirvió, entre otras cosas, para la construcción-creación del Centro Regional de Innovación y Desarrollo Espacial en Atlacomulco (CRIDEA), cuya gestión y construcción data desde los años 2016, 2017 y 2018. 

 

QUE DEBIDO a la desaparición de este Fideicomiso el proyecto de construir nanosatélites en el CRIDEA está en peligro de concretarse por la falta de recursos económicos, por ello las diputadas locales Julieta Villalpando Riquelme y Lourdes Garay Casillas hicieron un “LLAMADO a las autoridades del Estado de México para que destinen al menos 20% del presupuesto estatal de ciencia y tecnología a proyectos espaciales con beneficio social y a la creación de una Secretaría de Ciencia y Tecnología.” Que parte de esta lana serviría para aterrizar el proyecto en donde el alcalde Roberto Téllez ha apostado parte de sus canicas políticas, porque si no tiene el recurso, ése sueño de construir el primer nanosatélite atlacomulquense difícilmente se concretará. Que habrá que esperar a ver qué pasa con el “llamado” que las legisladoras le hicieron al gobierno Estatal, ojalá no se quede como las llamadas a misa…que hace caso el que quiere. ¿Cómo la ve?

 

QUE MUCHOS suspirantes a ocupar algún cargo de elección popular en las elecciones del próximo año, siguen muy movidos en redes sociales, la mayoría de las veces con el único afán de llamar la atención y tener la posibilidad de que sus institutos políticos los volteen a ver, porque sus posibilidades son nulas. Que independientemente de que están en todo su derecho de hacer lo que la ley les permita, hay algo que a lo mejor no tienen en su radar y es que las candidaturas a disputarse en el 2021 serán las primeras que tendrán que someterse a las nuevas reglas aprobadas por el Instituto Nacional Electoral (INE). 

 

QUE ESTAS NUEVAS reglas son conocidas como “3 de 3 Contra la Violencia de Género.”, lo que significa que NO podrán ser candidatos los “hombres” que: A) sean DEUDORES de pensión ALIMENTICIA; B) hayan sido condenados por ACOSO SEXUAL y C) enfrenten acusaciones de VIOLENCIA doméstica. Que los partidos políticos desde ya, deberán investigar con microscopio a sus prospectos, no vayan a llevarse la sorpresa de que a sus muchachos se los bajen con la ley en la mano y lo peor, que los evidencien como unos verdaderos y auténticos “machitos.”  ¿Cómo la ve?

 

El aplauso de la catorcena: Al Ayuntamiento de Atlacomulco. La última semana de octubre dio el banderazo a varias obras de infraestructura carretera en comunidades del municipio. 

 

El abucheo de la catorcena: A la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (PROPAEM) y su patética actuación en el caso de una asfaltadora en la colonia 2 de Abril. Dicho negocio no tiene permisos municipales o estatales para operar, contamina con toda impunidad y, por si esto fuera poco, le vale reverenda mad… que la PROPAEM les clausure las instalaciones. Botados de la risa quitan sellos y dejan en ridículo al gobierno estatal. ¡Viva México!

 

El beneficio de la duda: ¿Cuánto tardará el Ayuntamiento de Atlacomulco en dar resultados positivos con esto de la municipalización de Tránsito? 

 

Y de cinco… ¡ni uno!

 

Camine usted por una calle de Atlacomulco - prácticamente, la que guste-, o por la avenida principal de Santiago Acutzilapan y verá, por lo menos, un espacio apartado en el arroyo vehicular. Sillas, huacales, botes, macetas, o los siempre prepotentes taxistas será lo que encuentre. Lo de menos es saber quién lo hizo, porque son tantos y tan impunes, que este hecho es una invitación para que más personas los imiten.

 

¿Que además de eso encontró algo que obstaculiza su paso por la banqueta? Ah, ello también es parte del paisaje cotidiano. Alguna mampara publicitaria, alguna caja con mercancía, alguna mesa exponiendo productos, algún aparador robándole espacio a los peatones.

 

¿Es posible combinar “lo mejor” de ambas faltas? Sí, hay gente ingeniosa que ocupa espacios vehiculares para dejar su automóvil todo el día estacionado, sin contribuir en nada con el pago del espacio en los parquímetros y, además, utiliza su auto como exhibidor de mercancía que invade parte de la banqueta. 

 

 Es una burla.

 

Hay cuatro oficinas del gobierno municipal que están directamente involucradas en ello: Parquímetros, Desarrollo Económico, Gobernación y Movilidad. Cada una –en teoría-, tiene aspectos que le competen en toda esta serie de irregularidades. A ellas se añade una más, ésta de carácter estatal, la Delegación de Movilidad.

 

Lo irónico es que ninguna se toma en serio su trabajo. Si se les pide actuar, la respuesta inmediata es que eso le corresponde a alguna de las otras cuatro. Y así, en ese revoltijo burocrático, resulta que todos son responsables, menos quienes de verdad lo son.

 

¿Y la coordinación que, se supone, debería existir entre todas las áreas del Ayuntamiento? ¿Y la presunta profesionalidad del gobierno estatal?

 

A esta altura, parece que sólo es un buen deseo de gente ingenua. 

 

 

¿Confiar así?

 

Por años fue un anhelo, algo que se pedía porque varios pensaban –pensábamos- que esto era una solución al desastre vial que, día a día, se vive en la cabecera municipal.

 

Hablo, por supuesto, de la municipalización de las funciones de Tránsito, ya que, a lo largo de los años pasados, se demostró de manera más que evidente que las personas que estaban a cargo de ello –la Policía Estatal-, ni estaban interesadas ni mucho menos preparadas. 

 

Municipalizar el Tránsito tenía las ventajas de que, al contar con personal suficiente y la responsabilidad del Ayuntamiento de Atlacomulco, era mucho más cercana y rápida la reacción diaria ante la invasión de espacios peatonales, el estacionarse en doble fila, circular en sentido contrario y demás lindezas que suelen cometer los conductores a la hora de agarrarse a un volante.

 

Se logró, y eso es un punto a favor que no discuto.

 

Pero, lo que sí genera dudas –fundamentadas, además-, es que al frente de la Coordinación Municipal de Tránsito colocaron a la persona que menos podía demostrar que tenía los méritos para ello.  

 

Xóchitl Salazar Gaytán está como encargada de esta dependencia y eso, ya de entrada, no son buenas noticias. ¿Por qué? Hagamos un poco de historia para responder a ello.

 

Hacia el año 2013, la Jefa de Servicios de Vialidad y Tránsito, que formaba parte de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, era ella precisamente, Xóchitl Salazar Gaytán, comandante en ese momento. Ella estaba al mando de las señoritas oficiales que, cada que Dios se descuidaba, andaban en el centro de Atlacomulco, paseando o simplemente turisteando. 

 

Desde ese tiempo hasta su baja de la corporación, lo único que caracterizó al trabajo de la comandante Xóchitl fue la nula actividad de las oficiales, y la pésima reputación que se ganaron por acudir a los accidentes viales, no con la intención de resolver conflictos, sino buscando llegar a un “arreglo” que a los involucrados les evitara responsabilidades legales.

 

Por supuesto, comparto una historia particular con la comandante Xóchitl. En cierta ocasión, reporteando un incidente vial, se le ocurrió que debía alejarme del lugar y no cubrir la nota, según ella, porque “estorbaba”; con todo y estar lejos del lugar donde los elementos de la Cruz Roja –siempre, siempre respetables para mí- hacían su trabajo.

 

¿La verdadera razón? Una de las oficiales fue quien me la dijo: “la comandante está enojada por las notas que ha sacado d´interés, en donde dicen que las oficiales de Tránsito no estamos haciendo nada”.

 

De ese tamaño su forma de evaluar a quienes no aplaudían su falta de compromiso. Para ella, era más fácil enojarse que hacer el trabajo por el que le pagaban.

Y ahora resulta que a la misma persona que dio pruebas de su ineficacia –son años de ello- la premian nombrándola coordinadora de Tránsito Municipal.

 

Lo más gracioso es que, durante la ceremonia formal en que se equipó a las oficiales de Tránsito municipal, la ahora encargada de esta oficina aseguró que: “Serán cumplidos los lineamientos del reglamento de Tránsito del Estado de México, con estricto apego a los derechos humanos”.

 

Antes no lo hacía, pero ahora debemos creer que sí sucederá…

 

¿Cómo piensan en el Ayuntamiento de Atlacomulco que alguien, con todas estas deficiencias, puede hacer un trabajo mejor que el realizado anteriormente? ¿Esperan resultados distintos así?

 

Según sé, alguien muy, pero muy cercano al alcalde, abogó por ella e intercedió ante quien toma las decisiones. Veamos si el resultado no se le revierte.

 

Y si, por el contrario, el trabajo que realiza es excelente, será una linda manera de callar bocas. La mía y de varias personas más.

 

A propósito: Qué alborotados andan varios en el ayuntamiento. Directores,  coordinadores y achichincles de regidores  ya no ocultan nada a la hora de soñar con regidurías. ¿Pedirán licencia para, de plano, afianzar sus aspiraciones dentro de sus partidos? ... ¡Ja! ¡Cómo no!

 

UN FISCAL ANTICORRUPCIÓN NOVOHISPANO 

 

“Las leyes son como telarañas que atrapan pequeñas moscas con mucho rigor, mientras que cualquier poder fuerte las rompe.”

Rosenmüller

 

La idea: En el siglo XVIII fue nombrado un Visitador por los reyes de España para combatir la corrupción en la Nueva España. Hoy olvidado, Francisco de Garzarón hizo una gran labor y, si bien no logró erradicar la corrupción de aquella época, hizo que un buen número de funcionarios fueran condenados por andar en malos pasos.  Hoy sería muy apreciado un Fiscal Anticorrupción como él. 

 

En su libro “Corrupción y Justicia en el México Colonial, 1650-1755” (https://books.google.com/books/about/Corruption_and_Justice_in_Colonial_Mexic.html?id=NE6PDwAAQBAJ ) el profesor Christoph Rosenmüller  hace un recuento de lo que en aquél entonces se entendía como corrupción y los esfuerzos que se hacían para combatirla.    

 

De acuerdo con el autor, la corrupción estaba asociada principalmente con la impartición de justicia y las arbitrariedades que se cometían alrededor de ella. Esto sigue vigente, pero con algunas diferencias importantes. Por ejemplo, en ese entonces era normal la venta de puestos que se otorgaban sin importar la preparación o capacidades técnicas de los aspirantes, lo cual no era considerado como corrupción. 

Sin embargo, lo que sí se consideraba corrupción era dar los puestos a quien no tuviera los méritos necesarios. Pero estos méritos no se entendían como ahora, sino que consistían en ser de origen noble, tener sangre “limpia” (no mezclados con otras razas) y gozar de buena reputación.

 

Se decía que, si no se tenían esos méritos, era más fácil que los juzgadores se prestaran a malos manejos en la impartición de justicia. En realidad, los nobles sin recursos protegían sus fuentes de ingresos y estaban dispuestos a denunciar como corrupción la asignación de esos puestos a advenedizos, que no eran nobles, pero sí tenían dinero. 

 

Otro aspecto que difería de nuestro concepto de corrupción es que los regalos dados a cambio de favores eran una práctica aceptable, por considerarse un agradecimiento del favorecido hacia el impartidor de justicia que lo había ayudado. Los regalos eran cuantiosos, pero nadie veía nada malo en ello, sino que se entendía como una cortesía, aunque, desde luego, influían en la decisión de la autoridad que recibía el regalo.

 

A pesar de estas situaciones que ahora pueden parecer extrañas, aunque hace poco eran práctica corriente, existía mucha arbitrariedad en la impartición de justicia, de tal forma que se convirtió en un escándalo que llegó a oídos de las más altas autoridades en España, a finales del siglo XVII y principios del XVIII. El sistema permitía que las denuncias fueran recibidas y escuchadas, pero no se hacía lo suficiente para castigar a los transgresores. 

 

Es así como el rey Felipe V, la reina Isabel Farnesio y su ministro principal Giulio Alberoni, deciden enviar una visita general orientada a reformar el sistema judicial de la América hispana y para ello nombraron a un Visitador. Una especie de fiscal anticorrupción que tenía por misión atender las numerosas denuncias que se recibían y castigar a los culpables.

 

Para ello nombran al Visitador General Francisco de Garzarón Vidarte quien inicialmente llegó a la Nueva España como Inquisidor de la Santa Inquisición. 

 

Originario de Pamplona, estudió en la Universidad de Sigüenza derecho canónico e hizo carrera eclesiástica. Todavía le tocó como inquisidor realizar quizá el último Auto de Fe realizado en la Nueva España, donde un fraile herético fue quemado vivo en la hoguera.

 

A los reyes les gustaba escoger inquisidores para realizar visitas generales, porque “conocían bien el procedimiento de investigación, recopilación de evidencias, interrogar a sospechosos y evaluar su testimonio”. Así el Visitador interrogó a cerca de 700 testigos y, como resultado de su Visita General, Garzarón suspendió a 13 de los 19 jueces y fiscales y a 156 funcionarios entre 1719 y 1723. 

 

A pesar de los trescientos años que nos separan de dicha Visita, algunas lecciones útiles se podrían extraer de la actuación del Visitador General Garzarón. Estas son: se nombró a un Visitador General con total independencia y autoridad sobre las autoridades locales, pues estaba por encima del Virrey y, por tanto, le podía pedir cuentas. 

 

Se apoyaba en la voluntad política de los reyes para acabar con los abusos; tenía la capacidad técnica de inquisidor que le permitía allegarse de pruebas y elementos para llegar a la verdad; contaba con la capacidad jurídica necesaria para llevar a buen término las sanciones para condenar a los jueces y funcionarios corruptos, a pesar de la complejidad jurídica que había en esa época. Era una persona con la dedicación, honradez, integridad y reputación que le permitía llegar al fondo de los asuntos sin corromperse ante las dádivas que le ofrecían. 

 

Ojalá algunas de estas lecciones se pudieran aprovechar ahora para combatir la corrupción a fondo. No se puede revivir al inquisidor Garzarón, pero sí se puede aprender mucho de su actuación. 

 

EL PROCESO ELECTORAL 2020-2021 EN MARCHA

 

Como es sabido, el pasado 7 de septiembre inició oficialmente el proceso electoral rumbo a las elecciones del 6 de junio de 2021. Aunque para el caso del Estado de México, el inicio de los procesos electorales se aplazó para enero del próximo año, debido a la reforma aprobada por la Legislatura Local al Código Electoral.

 

Lo anterior no ha limitado la efervescencia de la clase política mexiquense en torno a dicho proceso electoral, en varios municipios del estado se observa el trabajo comunitario de los aspirantes a puestos de elección popular de diversos partidos políticos, el tema es ya también materia de trabajo de analistas políticos y medios de comunicación, entre otros actores interesados en la vida política de nuestra entidad federativa. 

A continuación se listan algunos datos que delinean el perfil de los comicios en comento. 

  • 96 millones de electores potenciales. 
  • Se elegirán a 3,528 representantes populares. 
  • Por primera vez habrá posibilidad de reelección en la Cámara de Diputados. 
  • 10 entidades federativas implementarán el voto electrónico para los mexicanos residentes en el extranjero, quienes podrán emitir su sufragio para las elecciones locales: Baja California Sur, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí, Zacatecas y el diputado migrante de Jalisco.

Se renovarán los siguientes cargos de elección popular:

  • Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
  • Gubernaturas de 15 estados: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.
  • Congreso local en 30 entidades. Excepto Coahuila y Quintana Roo.
  • Ayuntamientos y Alcaldías en 30 entidades. Excepto Durango e Hidalgo.

Estos son los partidos políticos participantes a nivel nacional.

  • Partido Acción Nacional (PAN)
  • Partido Revolucionario Institucional (PRI)
  • Partido de la Revolución Democrática (PRD)
  • Partido Verde Ecologista de México (PVEM)
  • Movimiento Regeneración Nacional (Morena)
  • Partido del Trabajo (PT)
  • Movimiento Ciudadano (MC)
  • Partido Encuentro Solidario (PES).
  • Redes Sociales progresistas.
  • Fuerza Social por México.

En opinión de Lorenzo Córdova, Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), la elección de 2021 implicará la renovación más grande del poder público en la historia de nuestro país y en ella se pondrá a prueba la consistencia de la democracia.

 

Se comparte la tesis de que, a diferencia de anteriores elecciones, en las que la imagen social del partido político, el perfil del candidato, la propuesta electoral y la campaña proselitista, eran los factores que determinaban generalmente el resultado de los comicios, en el proceso electoral de 2021 no será así, el elemento de mayor peso en la conciencia del electorado, será el contexto socioeconómico y político que impera en nuestro país. 

 

El próximo 6 de junio los electores les cobrarán a partidos políticos y candidatos la factura por la desigualdad, la pobreza, la inseguridad, el narco tráfico, la violencia en general y la violencia de género en particular, la decepción de la sociedad con los partidos y clase política, la corrupción e impunidad aún persistente, sobre todo en los ámbitos estatal y municipal, los efectos nocivos de la pandemia del COVID-19 en la sociedad mexicana, el desempleo y la caída del poder adquisitivo de miles y miles de familias, a lo largo y ancho del territorio nacional, la ineficiencia en la gestión de gobierno, salvo algunas excepciones, el deterioro de los servicios públicos y un largo etcétera.

 

Hoy por hoy es inobjetable el malestar que permea en la conciencia del colectivo social, expresado en categórica decepción en contra de partidos políticos, así como en los resultados de la gestión gubernamental, sin distingos de signos ideológicos, siglas y colores.

 

Es acentuadamente previsible que el electorado tomará en cuenta al momento de emitir su voto, el déficit en el desempeño de gobernadores, diputados, presidentes municipales, alcaldes, miembros de cabildos y de otros cargos locales; que nadie se manifieste ajeno o sorprendido a este descontento social.

Un elemento más que abonará en contra de los candidatos del partido en el poder federal, serán las secuelas del proceso de elección de sus nuevos dirigentes: pugnas, divisionismo y descalificaciones entre los grupos conformados a raíz del proceso de elección del Presidente y Secretario General del partido.

 

La nociva fragmentación de la clase política al interior de Morena, generada por la ausencia de líderes -más allá de la figura de Andrés Manuel López Obrador-, capaces de frenar institucionalmente las desbordadas ansias de poder de los contendientes a la dirigencia del partido, también incidirá en el sentir del electorado al momento de votar.

 

Por otro lado, no sería extraño que las elecciones de junio de 2021, generaran como resultado predominante el abstencionismo, o por lo menos en porcentaje preocupante para la representación política de partidos y candidatos, pero, sobre todo, para la gobernabilidad que el statu quo imperante en nuestro país demanda. Un ejemplo que apunta en esa dirección, es la baja participación de votantes en los comicios locales de Coahuila e Hidalgo, celebrados el 18 de octubre del año en curso, con el 39.4% y el 48.9%, respectivamente, de acuerdo con datos preliminares al momento de escribir el presente artículo.

 

Es previsible que el descontento de la sociedad mexicana, generada por el descredito de figuras políticas de los principales partidos políticos: PRI, PAN, PRD y Morena, a consecuencia de actos de corrupción que han sido ventilados a la luz pública, se manifieste con incipiente participación en los próximos comicios, tanto federales como locales.

 

Otro de los problemas que padece actualmente el sistema de partidos en México y que incidirá en el desarrollo del proceso electoral en marcha, es la ausencia de líderes naturales, con el perfil visionario y la capacidad de generar confianza y de lograr conciliar los intereses de grupo al interior de sus partidos, así como realizar un óptimo trabajo de interlocución con la sociedad. Ya que como lo señaló recientemente el analista político Raúl Rodríguez Cortés (El Universal 2 de octubre de 2020), “muchos mexicanos no se sienten representados por los partidos políticos existentes”.

 

La necia conformación de grupos de interés y camarillas al interior de Morena y el resentimiento que derive del sinuoso, atípico y accidentado proceso electoral de sus dirigentes, generará un clima de desconfianza y descalificación sistemática entre sus militantes y muy probablemente un divisionismo, como se observa a estas alturas del proceso -20 de octubre de 2020-, situación que impactará negativamente en la percepción del electorado. 

 

Los factores anteriormente descritos, son los elementos más visibles en el contexto de desarrollo del proceso electoral 2020-2021, los que directa e indirectamente incidirán en los resultados del mismo y a los que se sumará el óptimo uso de los activos con los que cuenta cada partido político. 

 

LA SOMBRA DEL VIENTO

 

“Conserva tus sueños, nunca sabes cuándo te harán falta”.  Carlos Ruíz Zafón.

 

 

Hace unas semanas, en Facebook, alguien le preguntaba a una amiga, doctora en letras, escritora  y gran amante de los libros, si era válido subrayar éstos para destacar frases interesantes.  No sé si la experta en la materia respondió; si lo hizo, no recuerdo la respuesta.  Pero la pregunta me llevó a reflexionar que, en mis casi cinco décadas de lector asiduo –que no siempre muy refinado- nunca he subrayado o marcado un libro, por lo que cuando he querido volver a alguno de ellos en la búsqueda de cierta frase o párrafo memorable, por lo general me llevo un frentazo y tardo varias horas en hallarlo.

 

Si existe un libro con frases ingeniosas y dignas de reflexión, es “La sombra del viento”, del escritor recientemente fallecido (apenas el pasado 19 de junio, a los 55 años de edad) Carlos Ruíz Zafón.  Lo primero que leí  la madrugada de ese día –día especial para mí, por otra parte, pero no viene al caso mencionarlo en este artículo- fue que el novelista había perdido la batalla contra el cáncer en su casa de Los Ángeles, donde residía desde hacía tiempo.  En ese mismo momento me propuse, como homenaje a quien tantas horas de esparcimiento me dio a través de sus páginas, releer la obra de 2001 que lo catapultó a la fama y de la cual lleva, hasta el momento, 15 millones de ejemplares impresos en 36 idiomas.   La segunda novela española más vendida de todos los tiempos, sólo superada por de El Quijote.

 

“La sombra del viento” es el primer volumen de una tetralogía complementada por “El juego del ángel” “El prisionero del cielo” y “El laberinto de los espíritus”.  Sin llevar un orden cronológico, los cuatro libros están entrelazados a través de algunos personajes clave entre los que destaca, desde luego, un hombre peculiar con turbio pasado que se hace llamar Fermín Romero de Torres, apelativo que, sabremos en el transcurso de la novela, tomó un día del cartel de una plaza de toros.  Es este personaje, de hablar rebuscado y anecdotario infinito, quien pronuncia buena parte de las frases que le quedan al lector grabadas indeleblemente en su memoria.  Una especie de filósofo urbano de quien el protagonista –el adolescente Daniel Sempere- abreva la sabiduría aprendida en las calles por Romero de Torres y transmitida al joven no siempre de una manera amable.

 

“La sombra del viento” puede catalogarse como un libro de suspenso o de aventuras, pero también es una obra reflexiva que lleva al lector a hacer memoria mientras pasa las páginas y a identificar en los personajes a nuestros conocidos, a algún familiar, a un antiguo amor imposible y, desde luego, a uno mismo.   Finalmente “los libros son espejos: sólo se ve en ellos lo que uno ya lleva dentro”, como  afirma Julián Carax, el hombre cuyo rastro se empeña en seguir Daniel y que lo llevará a adentrarse en una serie de acontecimientos insospechados.

 

Pero “La sombra del viento” es también una apología a los libros; quienes gustamos de ellos gozamos al leer sobre el ficticio “Cementerio de los libros olvidados”, de la calle del Arc del Teatre, que tan detalladamente describe Ruíz Zafón, con su guardián Isaac Monfort, prácticamente un eremita dedicado en cuerpo y alma a la literatura.

 

“La sombra del viento” también nos lleva a recorrer una Barcelona que seduce al lector y lo lleva a comprender por qué a esa ciudad se le conoce como “La gran hechicera”.  Desde un inmueble oscuro y miserable en La Ronda de San Antonio, hasta un edificio ostentoso en La Plaza Real; sin dejar, desde luego el misterioso caserón de la familia Aldaya, en la Avenida del Tibidabo 32, a punto de convertirse en un lujoso hotel.  Recorre la novela el siempre triste cementerio de Montjüic -¿hay uno que no lo sea?- y el famoso restaurante “Els quatre gats”, donde eran asiduos Picasso, García Lorca y Salvador Dalí, sin dejar pasar el Ateneu Barcelonés y desde luego, la catedral de Santa María del Mar, que trascendió al mundo gracias a la pluma de otro gran autor catalán, Ildefonso Falcones.

 

Sin haber pisado Barcelona nunca en mi vida –lo habría hecho el pasado marzo pero, ya saben, Covid 19- pude con “La sombra del viento”, respirar la magia de aquella gran urbe, donde convergen grandes expresiones del arte, del deporte y de la pujanza industrial española.

 

Invito a quienes esto leen a que se sumerjan en las páginas de un libro que –cuando decida hacer la lista de mis diez favoritos- estará en un lugar preponderante.  Les dejo dos frases más, halladas en ese volumen: una de ellas me llevó a definir una decisión trascendente en mi vida; la otra me impactó en esta relectura, por la vigencia que tiene en nuestro país y los tiempos que estamos viviendo.

 

“Alguien dijo una vez que en el momento en que te paras a pensar si quieres a alguien, ya has dejado de quererle para siempre...”  

 

 

“Las personas están dispuestas a creer cualquier cosa, antes que la verdad.”

 

Carlos Ruíz Zafón, quien afirmaba: “Me convertí en un escritor, en un narrador de cuentos, porque de lo contrario habría muerto, o algo peor” falleció a los 55 años, una edad en la que mucha gente está en una era dorada de productividad y disfrute de la vida.  Me consuela saber que, al término de la cuarta parte de su famosa saga, en  2016, declaró: “Este libro es la culminación de todo lo que he querido hacer». 

 

RUÍZ ZAFÓN, Carlos

“La sombra del viento”, 

Editorial Planeta Mexicana, S. A. de C. V.

Primera edición impresa en México,

décima sexta reimpresión, febrero 2014.

569 páginas.

D. R. © Carlos Ruíz Zafón

 

Guadalajara, Jalisco, octubre 22, 2020.

¿SORPRÉNDEME O SORPRENDENTE 2020?

 

Cada que inicia un año nuevo, nos creamos ciertas expectativas de lo que nos espera durante su transcurso, de cómo nos irá, que nos deparará, que sorpresas nos traerá; ¿pero que nos dejó este 2020?

 

Sin duda alguna, la mayoría de los individuos, esperaban grandes logros personales y profesionales durante este año, por ser tan esperado y tan marcado por su numerología, ya que un 20-20 daba mucho que decir.

 

Sin embargo, empezó con naturalidad, transcurriendo dos meses con normalidad, sin imaginar que para marzo todos empezarían a hablar de un tan sonado Covid-19, de que se tenía que estar en cuarentena, de tener ciertas medidas sanitarias, tener clases virtuales, el trabajar desde casa, etc.

 

Pero, para empezar, la cuarentena no solo duró, como su nombre lo dice, 40 días, ya estamos a noviembre y se llevan ya 8 meses en pleno confinamiento, a pesar de las modificaciones en el semáforo epidemiológico, y que, a pesar de ello, pasaremos nuevamente al color rojo. 

 

A estas alturas del año solo se espera a que se termine de buena manera, en el sentido de que las cosas mejoren o por lo menos estemos en semáforo anaranjado, o bien se logre pasar a amarillo, porquetodas las pérdidas humanas que ha habido son tan lamentables y tan inesperadas.

 

Y quien iba a pensar que el Covid-19C dejaría tantas muertes en todo el mundo, en países tercer mundistas que a pesar de sus innovaciones tecnológicas, sus grandes riquezas no se pudo hacer nada ante tan impresionante y determinante virus, creado o no por la humanidad y que acabó con la misma.

 

Y qué decir de las clases virtuales y el trabajo desde casa, en el primero de los casos, consideremos que la mayoría de los estudiantes no cuentan con servicio de internet en casa o simplemente con un televisor o medio digital como su base de trabajo. Y eso se decía solo para finalizar el periodo escolar 2019- 2020, hoy ya casi va a ser evaluación del ciclo escolar 2020-2021 y aun se sigue teniendo dificultad para ello.

 

En el tema del trabajo en casa, a muchos favoreció, ya que se tenía la facilidad de trabajar en el momento y hora disponible, el estar con la familia, el no tener ningún contacto o riesgo de relación con personas contagiadas o estar más en contacto el virus. Puntos a favor y en contra para pocos o para muchos, o en el peor de los casos, se llegó al desempleo.

 

Y entonces, ¿qué podemos esperar todavía de este año? Que nos sorprenda con alguna noticia buena, dentro de cualquier aspecto personal o profesional o que volvamos a estar en cuarentena de no salir para nada durante los próximos meses o incluso ya tener que vivir con este estilo de vida.

 

Y hablando de este nuevo estilo de vida o nueva normalidad, tendríamos que adoptarnos todos, pero, así como son muchos de ingenuos o de cabeza dura (por no ofender a algunos), no creo se pueda lograr algún cambio y eso por muchos aspectos, ya que esto llegó a afectar tanto en aspectos económicos, culturales y sociales. 

 

Hablando de estos aspectos, se dio que el cancelar desde tradiciones religiosas como culturales y sobre todo sociales, costumbres que año con año se esperaban con tanto fervor y que ojalá se vuelvan a revivir con el paso del tiempo. Pero sobre todo, este 2020 se llevó los mejores recuerdos dentro de estas tradiciones. 

 

Sin duda alguna este 2020 ha sido un año que nos ha marcado, que ha dejado mucho de qué hablar, se ha llevado a grandes y entrañables personas, que nos ha enseñado el valor del amor y la unión familiar, el saber valorar el trabajo, la familia, los amigos; el aprender un nuevo estilo de vida, el adaptar ciertas costumbres de higiene todo a favor de uno mismo.

 

Y entonces, sorprendénme o sorprendente 2020.

 

15 DE NOVIEMBRE, “DÍA NACIONAL CONTRA EL USO NOCIVO DE BEBIDAS ALCOHÓLICAS”

 

 

El consumo de alcohol es uno de los principales factores de riesgo a la salud en nuestro país, y sobre todo para los jóvenes y menores de edad. De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Tabaco y alcohol, cuatro de cada diez menores de edad (39.8%) han consumido bebidas alcohólicas alguna vez en la vida. Además, los datos señalan que este consumo no es igual entre hombres y mujeres; ya que entre 2011 y 2016 el consumo excesivo de alcohol aumentó 250% en ellas.

 

Se entiende por uso nocivo del alcohol, al consumo de bebidas alcohólicas en exceso, al consumo que pone en riesgo el desarrollo y la salud de quien las consume y que implica con frecuencia consecuencias sociales adversas.

 

De acuerdo al artículo 185-bis de la Ley General de Salud, el uso nocivo del alcohol, se refiere al consumo de bebidas alcohólicas:

  • Por menores de edad.
  • Por mujeres embarazadas.
  • Por personas que van a manejar vehículos de transporte público, automotores o maquinaria. 
  • Por personas que van a desempeñar tareas que requieren habilidades y destrezas, o que implican el cuidado de otras personas. 
  • Por personas con alguna enfermedad crónica.

Específicamente, en niñas, niños y adolescentes, el alcohol:

  • Interfiere con la maduración de su cerebro, lo que ocasiona efectos a largo plazo en el aprendizaje, la memoria, el control de las emociones y su uso continuo genera adicción.
  • Afecta el funcionamiento del sistema inmune, haciéndolos más susceptibles a enfermedades infecciosas.
  • Además, como su hígado aún se encuentra en desarrollo, el menor no es capaz de eliminar el alcohol tan rápido como una persona adulta, lo que aumenta el tiempo en que este permanece intoxicado.

El consumo de alcohol es un factor de discapacidad importante, que impide que las personas alcancen un desarrollo pleno, ya que tiene efectos negativos en las esferas familiar (como la violencia intrafamiliar), académica (deserción escolar y bajo rendimiento académico), social (problemas con el grupo de amigos), laboral (despidos) e incluso económica.

 

En nuestro país, la Ley General de Salud  considera el consumo de bebidas alcohólicas por menores de edad como uso nocivo de alcohol, y en su Art. 220 equipara la venta o suministro de bebidas alcohólicas a menores con el delito de corrupción de menores de edad. A pesar de ello, el subsistema de información de urgencias de la Secretaría de Salud reporta mensualmente un promedio de 200 menores de edad atendidos en urgencias por intoxicación etílica aguda.

 

 

Ante este panorama, el pasado 8 de mayo de 2018, el H. Congreso de la Unión publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se declara el 15 de noviembre de cada año como “Día Nacional contra el Uso Nocivo de Bebidas Alcohólicas”.  Esta fecha busca crear conciencia sobre los efectos negativos que produce el alcohol en la salud de niñas, niños y adolescentes, y con esto, generar alternativas desde y hacia los jóvenes para que exploren alternativas de vida libres de alcohol.

 


Por lo anterior, en ocasión de esta conmemoración, deseamos recordarles a la población en general y principalmente a los padres de familia que eviten suministrar bebidas alcohólicas a los menores de edad.

Sugerimos que eviten prácticas de riesgo como:

  • Dar a probar alcohol a menores de edad, con el argumento erróneo de que es mejor que aprendan a tomar en casa y no afuera.
  • Venderles alcohol o “hacerles el paro” comprándoles las bebidas.
  • Mandarlos a comprar bebidas alcohólicas o 
  • Pedirles que preparen alguna mezcla o coctel  para sus padres o familiares cercanos.
  • Por el contrario, recomendamos a los padres y adultos que en su interacción con menores:
  • Platiquen con ellos sobre los riesgos del consumo de alcohol a temprana edad. Indaguen cuál es su opinión sobre el alcohol.
  • Tengan conversaciones cortas y frecuentes sobre el tema, comenzando a una edad temprana, pues tener pequeñas charlas constantes es más efectivo que tener una “gran plática”.
  • Expliquen que existen otras maneras de divertirse sin involucrar el consumo de alcohol.
  • Prediquen con el ejemplo, no abusen del alcohol y menos en presencia de menores.
  • Escuchen sus dudas y problemas, oriéntelos para que eviten consumir alcohol u otras sustancias psicoactivas.
  • Enséñeles a decir “NO” a pesar de la presión de sus amigos.

Recuerden que si requieren mayor información o atención pueden acercarse a los servicios de prevención y tratamiento del consumo de alcohol  en CAPA Atlacomulco.